Hacia las zonas más remotas de Kalimantan
Continuando nuestro viaje misionero, nos dirigimos a una de las zonas más remotas, exóticas y bellas del planeta: Indonesia. Allí encontramos la joven Provincia SSpS de Kalimantan.
En este artículo conocerás la historia, la geografía, los servicios misioneros y los desafíos que las hermanas encuentran para estar al servicio, especialmente de las personas que viven en los lugares más distantes y se enfrentan a las mayores dificultades.
Breve historia de las SSpS en Kalimantan
En 1984, Mons. Prajasuta, MSF, obispo de la diócesis de Banjarmasin, invitó a las hermanas SSpS a trabajar en Palangka Raya, que en aquella época era la zona de misión de la diócesis de Banjarmasin. El 25 de julio de 1985, las tres primeras hermanas fueron enviadas de la Provincia de Flores a Kalimantan. Se trata de las Hnas. Andrea, M. Margaretha Wulu, Elisabeth Pamul, y Patrisia, María Ursula.
En 1999, la provincia de Flores se dividió en tres partes: La provincia de Flores Este, con su sede en Kewapante – Maumere, la provincia de Flores Oeste, con su sede en Leda Ruteng – Manggarai, y la región de Kalimantan, con su sede en Palangka Raya.
El 2 de octubre de 2000 Kalimantan se convirtió oficialmente en una Región bajo el patrocinio de «María, Reina de los Apóstoles» pero todavía administrativamente bajo la Provincia de Flores Este. Tras 25 años de presencia y misión en Borneo, el 25 de marzo de 2010 la Región de Kalimantan fue elevada de categoría y se convirtió oficialmente en Provincia.
Las Comunidades
La provincia SSpS de Kalimantan tiene doce comunidades, incluida una comunidad para las hermanas mayores y otra como casa de formación para las prenovicias. Estas 12 comunidades trabajan en cuatro diócesis. En la Diócesis de Palangka Raya-Central Kalimantan, hay cinco comunidades de apostolado, la comunidad de Hermanas mayores y la comunidad de prenoviciado. En la Diócesis de Banjarmasin-Kalimantan del Sur, hay una comunidad; en la Arquidiócesis de Samarinda – Kalimantan Oriental, hay tres Comunidades de Apostolado y en la Diócesis de Tanjung Selor-Kalimantan del Norte, hay una Comunidad.
El total de miembros de la Provincia de Kalimantan es de 77 hermanas, de las cuales 51 son de votos perpetuos, 26 junioras y 11 misioneras enviadas al extranjero.
Uno de los mayores retos para las hermanas de Kalimantan es la distancia entre la Casa Provincial y las comunidades. La mayoría están a más de 10 horas en autobús. Algunas están en zonas tan alejadas que necesitan avión, barco y autobús para llegar. Incluso en avión, el viaje puede durar un día entero debido a las escalas.
Geografia
Indonesia es el mayor archipiélago del mundo, con 17.000 islas. Kalimantan es una de las más grandes, con una superficie de 736.000 km2. La literatura occidental suele llamar a Kalimantan con el nombre de Borneo, que procede de la palabra Brunai, que significa en la lengua local muchos ríos (Kali significa río y Mantan muchos). Por eso Kalimantan es conocida como la «isla de los mil ríos».
En general, Kalimantan tiene un clima tropical con temperaturas relativamente constantes durante todo el año y un mínimo de lluvias de 60 mm. El mayor y más extenso potencial natural de la isla de Borneo son los productos mineros como carbón, petróleo, oro y hierro.
También son muy rentables los productos forestales, como los bosques de madera y ratán, caucho y palma aceitera. Los productos básicos, sobre todo agrícolas y pesqueros, se llevan al mercado a través del río en lanchas motoras o largas (en la lengua local se llaman klotok). Los habitantes de zonas remotas siguen dependiendo de los recursos naturales (productos forestales) para satisfacer sus necesidades económicas.
Religión y creencias
La mayoría de los Dayak (nativos que habitan la isla de Borneo/Kalimantan desde hace mucho tiempo) siguen adhiriéndose a la creencia original, Kaharingan. La dignidad de la vida según las creencias kaharingan puede alcanzarse practicando y obedeciendo todas las leyes consuetudinarias que contienen normas y códigos éticos para las relaciones humanas. Las ceremonias religiosas son una expresión de la creencia; sus actitudes y comportamientos están motivados por las creencias, y ambos se denominan derecho consuetudinario.
La Iglesia católica entró en Kalimantan alrededor de 1907, y la religión protestante había entrado antes, hacia el siglo XIX. Hay un buen número de personas dayak que se han convertido al catolicismo, pero a la hora de vivir su fe, todavía no son constantes. Un factor es que los agentes de pastoral que los atiende y acoge son pocos y están desigualmente distribuidos. Además, también influyen cuestiones culturales.
Ser católico significa entregarse completamente a Cristo y seguir las enseñanzas de la fe católica, lo que les resulta un poco difícil. Aunque han abrazado el catolicismo, siguen creyendo en el misticismo, los amuletos, los objetos sagrados, etc.
A través de la catequesis, la enseñanza de la fe católica influye positivamente en el desarrollo de la fe, el pensamiento y la apreciación de los valores cristianos en todos los aspectos de la vida, incluida la valoración del significado del sacramento del matrimonio. De este modo, el matrimonio tradicional ya no se ubica como el número uno.
Educación
La educación de la próxima generación de la nación es la principal preocupación del gobierno. Las instalaciones educativas llegan hasta el interior, aunque a veces no tienen el mantenimiento adecuado. Los asentamientos más pobres, remotos y subdesarrollados aún no han recibido toda la atención necesaria.
Por lo tanto, no se ha logrado lo que es un requisito previo para el éxito de la educación, como la equidad, la eficacia, la pertinencia y la calidad. El gobierno sigue esforzándose por mejorar la calidad de la educación en Indonesia en general y en Kalimantan en particular para dar a luz a la próxima generación con buen carácter y formación.
Ministerio Apostólico de las SSpS
En 1984, las SSpS comienzan con el ministerio pastoral. Las hermanas realizaban su apostolado de un lugar a otro a través de rutas fluviales utilizando lanchas motoras o Klotok porque el acceso por carretera seguía siendo difícil.
Después de muchos años de trabajo pastoral las hermanas respondieron a las necesidades de la comunidad en otras áreas como educación, salud, caridad social y JUPIC.
En 2008, las SSpS en Kalimantan comenzaron su ministerio en el campo de la educación, abriendo un grupo de juegos en la comunidad de Nanga Bulik, cuya patrona era la Beata María Helena. Desde entonces, el desarrollo de los servicios en el área de educación sigue creciendo. Para reforzar la presencia de nuestras escuelas, se creó la Fundación Kalimantan SSpS que se estableció oficialmente en 2012 con el nombre de «Menteng Mampaharing», que significa «un lugar que da vida».
Con el número creciente de estudiantes, el apoyo de los padres y del gobierno local, las escuelas se desarrollaron en la comunidad Nanga Bulik, comenzando con la construcción del jardín de infantes, luego la escuela primaria y la escuela secundaria.
Las SSpS en Kalimantan también abrieron un jardín de infantes y una escuela primaria en la comunidad de Nehas Liah Bing, en Kalimantan Este. Estas escuelas dependen de la Fundación Menteng Mampaharing. En el proceso de ayudar al desarrollo de talentos e intereses de los estudiantes en nuestras escuelas, la Fundación implementó un estudio de arte en 2019 y en la comunidad Beata Josefa PIR de la Aldea V, proporcionó un jardín de lectura para los niños.
Además del ámbito pastoral y educativo, las hermanas también prestan servicio en el área de salud. SSpS Kalimantan abrió una clínica en la comunidad Beata Helena de Telok para atender a los pobres.
Sin embargo, con la presencia de programas gubernamentales como BPJS y centros de salud en todos los pueblos remotos, los servicios de nuestra clínica no se desarrollaron. Además hay hermanas que trabajan en el Hospital Diocesano. Incluso, el servicio a los enfermos no sólo se realiza en clínicas y hospitales, ya que las hermanas también atienden a los enfermos de los pueblos durante las visitas para los servicios de comunión.
Existen servicios de misión y caridad social de JUPIC que tienen como objetivo proclamar los valores de la justicia, la paz, la integridad de la creación, el cuidado del medio ambiente y el desarrollo de habilidades para mujeres y niños sin distinción de etnia, raza o clase. Estas actividades se llevan a cabo con la intención de restaurar y elevar la dignidad humana degradada, aumentando el respeto por los derechos humanos de los excluidos, pobres y desamparados.
Estos servicios misioneros se siguen realizando, especialmente el apoyo para los niños recolectores de basura, desde el jardín de infantes hasta el primer ciclo de secundaria que no saben leer ni escribir. La actividad se centra en el aprendizaje de la lectura y la escritura. Además se realizan actividades con las familias de estos niños.
Alegrías y dificultades actuales
Hace 38 años que las SSpS trabajan en Borneo. La presencia de las SSpS sigue siendo bien aceptada y anhelada. Se aprecia la entrega total de las hermanas en cada servicio misionero, que se atreven a llegar a las zonas remotas y resisten la tormenta para servir a la gente.
Son muchas las bendiciones y los desafíos recibidos de manera personal, comunitaria y como provincia en aspectos de la vida tales como:
Espiritualid
Las Hermanas viven con alegría la espiritualidad y el carisma de la Congregación. Siempre enraizadas en el espíritu de la generación fundadora y en la herencia espiritual, creciendo en la fe y confiando en la ayuda de Dios que es nuestro proveedor.
Frente a muchos desafíos, somos cada vez más firmes en nuestra fe en la presencia de Dios en la misión. Siempre hay un deseo de vivir en su presencia, de amar cada vez más nuestra vocación y misión, de estar abiertas y receptivas a la situación. Experimentamos el amor de Dios que siempre nos acompaña, fortalece y guía. La fuerza del Espíritu Santo nos ha animado a renovar continuamente nuestra vida.
Desafiadas en el aspecto espiritual, nos esforzamos por ser más disciplinadas en todos los aspectos de la vida, más diligentes y fieles en el cultivo de la inteligencia emocional, social y espiritual.
Vivencia de la Consagración
Las hermanas se esfuerzan por vivir los votos a través del amor y la entrega gozosa. Confiando y entregando toda la vida a la providencia de Dios, viven con alegría su vocación de hermanas misioneras.
Los desafíos en la vivencia de nuestros votos: esforzarnos por llevar siempre la alegría y la misericordia de Dios a todos en la comunidad y en cada lugar de servicio. Seguimos aprendiendo a aceptar con humildad las críticas, los reproches y cualquier aporte que nos ayude a seguir creciendo en el proceso de autotransformación.
Vida en Comunidad
Estar arraigadas en la espiritualidad y el carisma de la congregación nos ayuda a vivir en el vínculo del amor fraterno, rezando unas por otras, apoyándonos, cooperando, escuchándonos, perdonándonos, respetándonos y honrándonos, aceptando los lados luminosos y oscuros de cada una.
Desafío: Nos esforzamos por vivir en comunidad intercultural e intergeneracional en nuestro camino común hacia la autotransformación.
Apostolado
El carisma misionero nos anima como mujeres discípulas enviadas a la tierra de Borneo para realizar el nuevo Kalimantan a través del servicio misionero en las áreas de Pastoral, Educación, Salud, JUPIC – caridad social. Permanecemos fieles, alegres y soportamos cualquier situación por el bien del servicio misionero compartido. Nos atrevemos a iniciar el servicio misionero en el área de Educación para responder a las necesidades de la sociedad. Los avances tecnológicos nos animan a ser más creativas en nuestro ministerio. También nos atrevemos a realizar apostolados con los «basureros», las mujeres «Café» y los estudiantes con necesidades especiales.
Los retos a los que nos enfrentamos en nuestro ministerio incluyen: en el área pastoral, el espíritu de sacrificio para visitar a la gente en lugares remotos, ser más sabias en el uso de los medios de comunicación para la formación en la fe de la gente. En el área de educación, las exigencias de las normativas gubernamentales y la mejora de la calidad de la educación. En el área de salud, los programas gubernamentales para la distribución equitativa de los servicios sanitarios gratuitos. En el área de Caridad Social y JUPIC, atreverse a dar voz al derecho a la vida de las personas que son tratadas injustamente.
Visión de futuro y posibilidades de cruzar más fronteras
Basándonos en las direcciones del 15º Capítulo General, nosotras, como Provincia SSpS de Kalimantan, nos comprometemos a ver la posibilidad de cruzar más fronteras para difundir la buena nueva de Dios a todas las personas, especialmente a aquellas que no conocen a Cristo.
Movidas por el Espíritu vivificante, reavivamos nuestra pasión por la misión de Dios. Buscamos cruzar múltiples fronteras para encontrarnos con las personas allí donde ellas están, especialmente con aquellas que son invisibilizadas o excluidas por nuestro mundo. (Dirección del XV Capítulo General)
= Nos comprometemos a hacer del Espíritu Santo el aliento de vida que nos da el valor de compartir sacrificadamente nuestras vidas para luchar y proteger a los débiles, los marginados, los incontables y los excluidos.
Despertadas por el grito de la Trinidad a través del dolor y el sufrimiento de la Madre Tierra y de nuestras hermanas y hermanos en los márgenes, descubrimos que la conversión ecológica y una vida sustentable se tornan un compromiso ético irrenunciable. (Dirección del XV Capítulo General)
= Creemos en la ayuda, guía y providencia de Dios que nos permite dar respeto y honor a la dignidad humana y emprender acciones concretas para plantar, cuidar y nutrir la vida de la Madre Tierra.
Reconocemos que somos parte de la oscuridad en la Iglesia y en la sociedad. Desde nuestra vulnerabilidad, nos levantamos con esperanza y unidad con el mundo herido y dividido. Nos comprometemos a vivir radicalmente nuestra consagración en comunidades interculturales, internacionales e intergeneracionales. (Dirección del XV Capítulo General).
= Nos esforzamos por vivir siempre en la presencia de Dios y experimentar su amor como fuente de vida, por tener una profunda relación con el Dios Trino como fuente de nuestra vida vocacional, comunitaria y misionera y por hacer que la comunidad sea nuestra CASA.
El mundo rápidamente cambiante, las nuevas tecnologías y la disminución del sentido de la vocación religiosa-misionera, nos exigen que cultivemos un espíritu de discernimiento como aprendices de por vida. En el proceso de formación holística, asumimos la responsabilidad de la integración y la transformación a nivel personal y comunitario. (Dirección del XV Capítulo General).
= Nos comprometemos a hacer del discernimiento una forma de vida, elaborar el proceso continuo de la vida y la formación de valores evangélicos para llegar a ser una persona integrada, abierta y dispuesta a aprender nuevos caminos en los servicios apostólicos y pastoral holística.
Impulsadas por la llamada que el Espíritu hace a la Iglesia en camino sinodal, revisamos y ampliamos nuestra colaboración, trabajo en red e interconexión. Escuchamos de manera especial las voces y los ritmos propios de las/os laicas/os que buscan vivir el carisma y la espiritualidad de las SSpS como socios/compañeros de misión. (Dirección del XV Capítulo General).
= Buscamos vivir la Perichoresis Trinitaria (la gran danza: la relación de comunicación) entre el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Vivir y hacer vida la espiritualidad y el carisma de la Congregación, y trabajar en red en respuesta a las necesidades de la Misión.
Atentas a las nuevas formas en las que el Espíritu nos mueve en la misión hoy, discernimos y rediseñamos/reformamos en consecuencia nuestras estructuras en todos sus niveles, mientras honramos el legado recibido. Acogemos el proceso natural de crecimiento y desprendimiento para que pueda surgir lo nuevo. (XV Dirección del Capítulo General).
= Nos comprometemos a hacer un uso eficaz de los medios espirituales existentes y estamos abiertas a aprender nuevas formas de servicio apostólico.
Declaración
«Nosotras, las SSpS de la Provincia María Reina de los Apóstoles de Kalimantan, nos comprometemos a estar inmersas en la danza/dinámica trinitaria, a emprender un camino de transformación profética para convertirnos en un medio de llevar la melodía del amor compasivo en el mundo».
Por: Hna. Imakulata Weka, SSpS, Hna. Imelda Irna, SSpS – (Equipo de Comunicación) y el Equipo de Liderazgo Provincial (Hna. Albina Ifi, SSpS-Provincial, Hna. Hermine Tuli Beding, SSpS-Consejera y Hna. Agnes Maria Beto, SSpS-Consejera).